Mi padre era un gran amante de las sopas, le
gustaban todas.
En invierno con el frío, para cenar siempre
tomaba una.
La que recuerdo que le hacía mi madre con más
asiduidad eran esas sopas de tomillo, aunque mi madre no le ponía el queso ni
las gratinaba.
Decía mi padre que esas sopas le ponían el “cuerpo en su sitio y le reconfortaba el
espíritu”
Ingredientes
para 2 personas:
400cc. de agua
Unas ramas de tomillo
4 rebanadas de pan
1 diente de ajo, sal
2 huevos
Queso para gratinar
Aceite de oliva virgen extra
Poner a hervir el agua, añadir el tomillo y
dejar infusionar unos 10 minutos. Colar.
Tostar las rebanadas de pan, restregar el ajo
por ambos lados y rociar con un poco de aceite.
En recipientes individuales que puedan ir al
horno poner unos 175-200 cc. de infusión de tomillo, dos
rebanadas del pan troceado, cascar un huevo y poner una capa de queso rallado.
Gratinar y servir con unas hojitas de tomillo.
NOTA: Son unas sopas ligeras, no son contundentes, a no ser que se le ponga
más pan, pero eso a vuestro gusto.
** El tomillo mejor fresco, pero si es seco
emplear menos cantidad.
** Las rebanadas del pan que no sean muy
grandes, eso ya lo veréis al ponerlas con la infusión.
Este tipo de sopas me encantan, sin duda porqué me recuerdan mucho las que me preparaba mi madre de niña.
ResponderEliminarCopiada está.
Peto,
palmira
Ficou excelente nem parece uma sopa.
ResponderEliminarPara mim seria uma refeição completa
bj
tomo nota de esta sopa xq no habia oido hablar nunca de ella y solo con ver la foto ya me entran ganas de hacerla hoy mismo!!! deliciosa
ResponderEliminar¡Hola Dolorss! No la conocía y me ha encantado, debe ser tan aromática como rica.
ResponderEliminarBesos.
No conocía esta sopa que debe ser tremendamente aromática y bien sabrosa.
ResponderEliminarBesos
Molt bones i suaus aquestes sopes. Jo en faig quan no tenim bé la panxa, llavors no hi poso formatge. Petons.
ResponderEliminarHola Dolors. Cada día aprendemos una cosa nueva. Esta receta era totalmente desconocida para mí y tiene una pinta deliciosa.
ResponderEliminarSaluditos.
Quina bona pinta, Dolors! I ben depurativa, amb farigola. I aromàtica, és clar! Les herbes remeieres de la mediterrània són... un gran tresor! Petons
ResponderEliminarMe venia genial una de estas para hoy, con el dia tan chungo que ha salido por aqui!!! un besito
ResponderEliminarPues yo soy como tu padre. Me encantan las sopas y si son para cenar en invierno, más todavía. Aunque sea sencilla ese gratinado de queso le aporta la cremosidad perfecta. Besos¡¡¡¡
ResponderEliminarM'agafo a la frase del teu pare i amb la teva milloria del plat, fantàstiques sopes
ResponderEliminarMuas
Eso son sopas de las de toda la vida y solo con un par de ingredientes .
ResponderEliminarGracias por comentar.
Petons