Rosta de pan con arenque y uva (arengada de casco)

En casa, cuando era pequeña, recuerdo a mi padre disfrutar comiendo arenques (arengada salada) son como sardinas grandes en salazón, vienen envasadas en unos cascos de madera y por esos se las suele denominar  “arengades de casco”.
Él los combinaba con fruta, generalmente uva, era uno de sus majares favoritos.
Ese contraste de dulce y salado a mi me encanta  y en más de una ocasión pero de tiempo en tiempo,  para desayuno o cena me dejo atrapar y caigo en la tentación.
 
Suelo comerlo con pan pasado por la sartén y como no, con uvas.
 

Ingredientes para 4 personas:
4 rebanadas de pan
4 arenques o arengades
200 gr. de uvas
Aceite de oliva virgen extra
 
Eviscerar los arengues, quitar las escamas, lavar y secar bien.
En una sartén con un poco de aceite, freírlos por ambos lados. Reservar.
 
En esa misma sartén, sin dejar enfriar el aceite, freír el pan, la rebanada entera, por los dos lados. Reservar.
 
Quitar la piel y la espina de los arenques y desmigarlos con los dedos.
Sobre la rebanada de pan frita poner el arenque y encima repartir unas uvas.
 
El resto de las uvas servir en recipiente aparte para combinarlo con esa rosta.
 
NOTA: Mejor que las rebanadas no sean de pan ancho, cuanto más corteza tengan mejor.
** También puede emplearse pan de día anterior.
** La uva mejor que sea sin pepita.
** No es necesario poner sal, ya lleva bastante.
** El contraste de sabores es lo mejor de esta rosta, lo peor es que es mucho frito.